Amado:
¿No sabes que tu cuerpo
es un templo del Dios viviente,
un templo no hecho con las manos
sino uno que ha sido formado
por el Arquitecto del universo?
Ha sido creado por medio de la
sabiduría infinita y el amor divino,
moldeado y formado por
la esencia pura del Ser.
Sólo el Infinito podría concebir
tal instrumento magnífico
de expresión.